Y por último, mi compañero de viaje en el vuelo de vuelta a casa (Zurich-Valencia):
A la derecha un matrimonio de suizos, amable pero no conversador, detrás un insoportable niño chino que la madre era incapaz de controlar (me sorprende que me sorprenda, pero con lo que he viajado, los largos y a veces duros trayectos, no tengo recuerdos de niños insufribles e impertinentes como éste, todo lo contrario!), pero a mi izquierda..... mirad (abajo) que compañía.......las cumbres nevadas de los Alpes. Que me recuerdan que el viaje sigue, o que otro viaje empieza, que la vida es un viaje, y éste, nuestro viaje a Asia, han sido muchas vidas en una...
Quisiera que el viaje que hoy empieza no sea el de la rutina y el del día a día, si no que pueda seguir descubriendo, sorprendiéndome cada día, que no hayan dos días iguales, que sea capaz de mirar a mi alrededor, de observar y sonreir a mis compañeros de viaje, de seguir haciendo amigos, contactar con gente estupenda, dando y recibiendo, compartiendo.... En definitiva, que tenga la esencia del que dejo...
difícil empeño, pero no imposible. Nada lo es, me enseña mi querida Asia ;-))
No os lo perdáis viajer@s... descubrid Asia! Cuando os llegue…. seguid la llamada….;-)) Gracias por acompañarme. Hasta siempre y muy pronto.
Buen viaje!!!
mariluz
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